- Sufres pero aguantas porque te sientes incapaz de hacerlo sin él/ella.
- Pánico al abandono, temor a que tu pareja te deje.
- Necesidad absoluta de tu pareja para tomar cualquier decisión.
- Baja autoestima.
- Pérdida de límites, haces cosas que no te gustan solo para satisfacer a tu pareja.
- Pérdida de control de tu propia vida, frustración e impotencia.
¿Reconoces estos síntomas en ti?
